¿Dónde has entrado?

Acabas de entrar a un extraño mundo, donde el discernimiento humano escribe con una extraña pluma. Mi teclado es rodeado por mi locura en un extraño halo que no puedo alcanzar a definir y cuando se mezcla con algunos profundos sentimientos... da este blog como resultado.

miércoles, 30 de mayo de 2012

Mucho ojo



De repente salté en parapente. Mi corazón acorazado se descorazonaba. Cada ida con caída. Cada vuelta con revuelta. La locura que no todo lo cura. Entender que en tender tendeles de mortero no está el mundo entero.Y volver a ver el velado velo.

¿Surrealismo? ¿Su realismo? Mi realidad, mi deidad, mi estabilidad. 

Siempre comentaban, en tenues susurros, la existencia de un equilibrio inestable. Yo lo creía y no a un tiempo. Yo me reía y no a un tiempo. Pero era cierto. La frontera invisible, de un mundo deseado y otro real, se desdibujaba suavemente con un carboncillo en su pueril capricho.

"Ver da verdad", pensaba el ciego en su ceguera. No veía la mentira del mundo intangible. Vi su ala visual en perfecto estado y el ala del conocimiento estaba tocada. Y aquí no lo cura la locura. Ni de ello libra el libro. Ni se desgaja el que trabaja.

¿Por qué coraza y corazón tienen la misma raíz? Una dura, el otro blando. Una fémina, el otro macho. Una inerte, el otro late. Una  fuerte, el otro blando.

Parece que aparece el desaparecido. ¿Un espejismo? Quizás. Porque el espejo sí engaña, es visual. Arráncate los ojos antes de confiar. ¿Por qué siguen en tu cara, en tu rostro? Es la fianza de la confianza. Es tu óbolo para el barquero del Hades. De tu cara a Caronte. Curiosa sátira.